«Concebimos un edificio de 22 Viviendas Protegidas que sirviera de referencia urbana por su calidad estética y espacial.»

El proyecto resuelve la geometría que generan las esquinas en forma de chaflán generando una composición a base de 3 piezas blancas que parten del suelo, actuando los chaflanes como charnelas de articulación. La disposición de huecos en fachada se agrupa en grandes piezas con planchas metálicas y con la introducción de los colores primarios en alternancia cromática.

El edificio, con emplazamiento privilegiado en el núcleo de Benicàssim y abierto a una gran plaza, se constituye en un hito o referencia urbana.

Un único núcleo de escaleras y ascensor sirve a 6 viviendas por planta con casi todas las piezas recayentes a la calle. Todas las zonas comunes disponen de abundante luz natural servida por un patio central cuya geometría viene generada por la disposición de los distintos accesos a las viviendas.